Siempre he creído que la palabra
de cualquier Poeta tiene más valor que cualquier estudio sesudo de cualquier miembro
de cualesquiera Academia de la Lengua. Juan Ramón Jiménez escribía para Dios y
dios y también para los pobres que se comunican como pueden pero que lo entendieron
y entienden a la perfección. Claro que luego está Zenobia y su cuerpo desnudo
en Madrid y al otro lado de este mundo. ¡Bravo por JRJ!
En Quimera
-
En el número 496 de la revista Quimera se ha publicado esta nota sobre *Meditaciones
del lugar*.
Gracias, Álex Chico.
*Si una de las tareas más apasiona...
Hace 1 día
No hay comentarios:
Publicar un comentario